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19/2/13

Prevención de lesiones por movimientos repetitivos


Los movimientos repetitivos son un grupo de movimientos continuos, mantenidos durante un trabajo que implica al mismo conjunto osteomuscular provocando fatiga muscular, sobrecarga, dolor y por último lesión. Los efectos de los movimientos repetitivos se manifiestan mayoritariamente en las extremidades superiores. La sintomatología asociada a los movimientos repetitivos puede presentarse de diferentes formas: dolor, fatiga y debilidad muscular, inflamación, adormecimiento y  hormigueo en las extremidades.



La Confederación Regional de Organizaciones Empresariales de Murcia (CROEM) ha elaborado el folleto Prevención delesiones por movimientos repetitivos donde de manera breve nos exponen cuales son los factores de riesgo y nos proponen una serie de medidas preventivas.

Factores de riesgo:                                                                                                 
  • Frecuencia de movimientos: Influyen la repetición y la velocidad de los movimientos.
  • Uso de fuerza: Influyen la intensidad de la fuerza requerida para realizar determinadas acciones y el tiempo durante el que se debe aplicar la fuerza.
  • Adopción de posturas y movimientos forzados.
  • Tiempo de recuperación insuficiente: Se considera tiempo de recuperación las pausas de descanso. así como otras tareas que representen una inactividad substancial de las extremidades.
  • Duración del trabajo repetitivo: Cuanto más tiempo se realiza el trabajo repetitivo, mas se incrementa el nivel de riesgo. Cuando una tarea repetitiva se realiza durante al menos 2 horas durante la jornada es necesario evaluar su nivel de riesgo
  • Otros factores de riesgo: Uso de herramientas vibratorias, dimensiones antropométricas del trabajador, compresiones localizadas, uso de guantes inadecuados para la tarea, imposición del ritmo de trabajo, tareas extralaborales.


Medidas preventivas:                                                                                              

  • Adaptar el mobiliario (mesas, sillas, tableros de montaje, etc.) y la distancia de alcance de los materiales a las características personales.
  • Utilizar medios mecánicos en la medida de lo posible.
  • Procurar mantener, en la medida de lo posible, la mano alineada con el antebrazo, la espalda recta Y los hombros en posición de reposo.
  • Evitar los esfuerzos prolongados y la aplicación de una fuerza manual excesiva. Alternar ambas manos.
  • Reducir la fuerza empleada en ciertas tareas manteniendo afilados los útiles cortantes y aguantando los objetos con ganchos o abrazaderas.
  • Participar en los reconocimientos médicos periódicos específicos.
  • Realizar ejercicios de relajación muscular.
  • Emplear las herramientas adecuadas para cada tipo de trabajo y consérvalas en buenas condiciones y sin desperfectos.
  • Comprobar si usas guantes de protección, que  se ajustan bien a la mano y no disminuyen la sensibilidad para evitar que se aplique una fuerza mayor a la necesaria.
  • Utilizar las pausas periódicas para recuperar tensiones y descansar.