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25/2/15

Síndrome visual informático por un uso excesivo de las pantallas

Fatiga ocular, picor, enrojecimiento, sequedad o visión borrosa son síntomas directamente relacionados con el Síndrome Visual Informático por un uso excesivo de las pantallas, y que según una reciente encuesta del Colegio Oficial de Ópticos Optometristas de Cataluña (COOOC) sufre hasta el 70% de la población. Ante estos datos, el Colegio Oficial de Ópticos Optometristas de Cataluña (COOOC) y la Facultad de Óptica y Optometría de Tarrasa han puesto en marcha la campaña “Visión y pantallas”, que explica cómo actuar para tener una visión eficiente de cerca y prevenir el Síndrome Visual Informático.
Pasar muchas horas ante una pantalla puede provocar muchas molestias, generalmente temporales. Las más frecuentes son: fatiga visual (49%), sequedad (27%), picor (24%), visión borrosa (20%), enrojecimiento (10%), lagrimeo (9%) o visión doble (2%). Y es que la mayoría de la población está frente a una pantalla más tiempo del recomendable, que serían unas dos horas al día. Muy lejos de las 10 horas y media que pasan los menores de 30 años, de las 9 horas y media en personas entre 31 y 45 años, de las 8 horas y media en personas de 46 a 60 años e incluso de las casi 4 horas en personas mayores de 60 años. Son datos extraídos de una encuesta online que el COOOC ha realizado recientemente sobre una muestra de 1.400 personas entre los 14 y 70 años en Cataluña.

Según algunos estudios, entre el 50% y el 90% de las personas que exponen sus ojos a una pantalla más de dos horas al día tienen molestias visuales que forman parte del Síndrome Visual Informático.

Fruto de estos resultados, el COOOC, en colaboración con la Facultad de Óptica y Optometría de Tarrasa, ha puesto en marcha la campaña "Visión y pantallas" para concienciar a la población de la necesidad de tener una buena visión de cerca y de adaptar los ojos a los cambios producidos desde la implantación de las pantallas. Para ver de cerca, los ojos realizan dos funciones básicas que permiten enfocar los objetos a distancias cortas: la convergencia y la acomodación, por las que se produce la visión binocular, integrando las dos imágenes (una de cada ojo) en el cerebro, donde se produce la visión.

Pasar muchas horas delante de una pantalla puede causar la aparición o la progresión de un problema visual a largo plazo. Y es que mirar a una distancia muy corta provoca un esfuerzo superior de enfoque al empleado en la visión de lejos, ya que la visión humana está diseñada para ver bien de lejos, por lo que al mirar una pantalla de cerca y durante muchas horas seguidas nuestro sistema óptico debe realizar un sobreesfuerzo muy importante.

Mirar a una pantalla también supone mirar una fuente de luz muy fuerte no natural de forma directa. Además cada vez empleamos una luz menos parecida al sol, por lo que nuestros ojos tienen que esforzarse más, de lo que surge la fatiga visual. Por otra parte, estos dispositivos emiten una luz led azul que, aunque reduce el consumo energético, a largo plazo puede provocar daños en las células de la retina, que no se regeneran.

Los reflejos en la pantalla también dificultan la visualización de textos e imágenes y pueden provocar estrés visual.

Por otra parte cuando pasamos muchas horas ante una pantalla, disminuye el parpadeo y, por tanto, también la secreción lagrimal, dando lugar a sequedad ocular y causando picor y escozor, entre otros síntomas.

Consejos básicos para evitar el Síndrome visual informático

Las pantallas son ya una parte ineludible de nuestra vida cotidiana y profesional, de modo que actualmente es prácticamente imposible evitar la exposición visual a estos dispositivos. Pero sí podemos seguir una serie de consejos para reducir su incidencia.

Regla del 20-20-20. Apartar la mirada durante 20 segundos cada 20 minutos enfocando a una distancia de 20 pies (6 metros)

Iluminación. Evitar los reflejos en la pantalla, especialmente de luces superiores o ventanas. Podemos emplear un filtro antirreflector en la pantalla. 

PosturaLa ergonomía es básica para conseguir un buen rendimiento visual. 

Posición de la pantalla. El monitor debe estar por debajo de la altura de los ojos. O la parte superior del monitor a la altura de nuestros ojos.

Parpadeo. Forzar el parpadeo voluntario o mantener cerrados los ojos 20 segundos de vez en cuando. Evitar ambientes muy secos por calefacción o aire acondicionado.