Sólo el 5% de los
empresarios creen que la Prevención de Riesgos Laborales es una vía relevante
de reducción de costes. Así hay una creencia generalizada de que hay pocos accidentes laborales y de que estos
no tienen una repercusión económica relevante para las empresas. Sin embargo la
realidad es distinta, como ponen de manifiesto los especialistas quienes señalan
que los incidentes son muchísimos y que
la partida de costes que ocasionan, fundamentalmente por tiempos perdidos, es
altísima.
Tipos
de costes
Entre los costes que deben ser tenidas en cuenta para
calcular la carga económica que representa la siniestralidad laboral para las
empresas se pueden señalar los siguientes:
1.- Costes de mantenimiento de la producción. Supone el
coste extra de procurar mantener la producción por parte de la empresa y que
incluirá desde el pago de horas extraordinarias, a los costes de sustitución y
formación, o los pagos adicionales de la empresa y a la Seguridad Social. Estos
costes recaen evidentemente en la empresa, pero a su vez repercuten en los
trabajadores afectados, por lo que representa de reducción de su salario
durante el periodo de baja. Así mismo afecta a la sociedad en general, por lo
que representa de subsidios de incapacidad laboral e impuestos no recibidos.
2.- Pérdida de ingresos a largo plazo. Afecta totalmente al
trabajador y a la sociedad por subsidios permanentes y pérdida de impuestos.
3.- Costes médicos. Representan los costes de atención
sanitaria y de rehabilitación que recaen plenamente en la sociedad.
4.- Costes de dolor y sufrimiento. Recaen totalmente en el
trabajador afectado y se barema en función de la gravedad del accidente.
Poniendo cifras
Distintos estudios han intentado poner cifras a los gastos
económicos que supone la siniestralidad laboral. Así en España se estima que el
coste orientativo de la siniestralidad laboral se sitúa en torno al 3% del PIB
y representa un monto superior a los 12.000 millones de euros.
En los últimos cinco años los costes totales por trabajador
accidentado han oscilado entre los 12.000 y los 11.000 euros.
Según un estudio realizado por la Universidad Pablo Olavide
sobre los costes derivados de los accidentes mortales de tráfico y que
representan la primera circunstancia de mortalidad laboral, un accidente mortal
supone un coste para la sociedad de 1,4 millones de euros, teniendo en cuenta
los gastos generados y la esperanza de vida de las personas que fallecieron,
mayormente jóvenes.
Según un cálculo publicado por The Journal of de American
Medical Association, el coste de tratar a personas con dolor de espalda y
cuello –una de las principales dolencias de origen laboral- fue de 86.000
millones de dólares en 2005 en EEUU. Y el trabajo perdido a causa de estos
dolores pudo costar a los empresarios cerca de 7.000 millones de dólares al
año.
Diversas entidades e instituciones europeas han establecido
un cálculo del coste de una enfermedad profesional cifrado entre 30.000 y 38.000
€.