Las oficinas son el foco de muchas enfermedades e
infecciones a causa de la gran cantidad de gérmenes que allí se acumulan. Se
estima que cada trabajador enferma una media de dos veces al año a causa de las
condiciones higiénicas del instrumental de oficina, como teléfonos o teclados
de ordenador. La suciedad de las mismas genera pérdidas económicas atribuibles a bajas laborales y tiempo perdido.
Los 5
puntos clave en los que los responsables de cada empresa deben
focalizar sus mejoras son:
Baños:
esta es la zona donde más se focalizan los problemas higiénicos de los centros
de trabajo, destacando por encima de todo los pomos de las puertas, y es que
una de cada cuatro personas no cree que sea necesario lavarse las manos tras
haber usado el baño. Según los especialistas, la cantidad de gérmenes y
bacterias en los baños podrían quedar reducidas en un 80% si todos los
empleados se lavaran las manos al salir del wc.
Teléfonos:
nuestro teléfono atrae unos 25.000 microbios por metro cuadrado. Parece
exagerado pero si tenemos en cuenta que un 25% de los trabajadores que no se
lava las manos al salir del lavabo luego usa su teléfono, lo entenderemos. Es
más, muchos de estos empleados utilizan el móvil mientras están en el baño.
Teclado
del ordenador: los escritorios de cualquier centro de trabajo
albergan 400 veces más bacterias que cualquier taza del wc. El teclado del
ordenador es el primer afectado ya que es ahí donde depositamos todos los
gérmenes y contaminantes que arrastramos de otros lugares. Y no olvidemos
mencionar que muchas personas comen en su mesa de trabajo, dejando que restos
de los alimentos caigan y queden atrapados entre las teclas del aparato, algo
que contribuye a aumentar los niveles antihigiénicos.
Office:
el habitáculo que se destina a comer y tomar café nunca podrá estar 100% limpio
si los trabajadores que lo usan siguen sin lavarse las manos tras usar el
servicio. Los expertos aconsejan usar guantes cuando manipulemos objetos que se
encuentren en el office.
Recepción:
al ser el lugar de paso tanto de trabajadores como de personas externas a la
empresa se convierte en el punto caliente donde contagiarse de una gripe o de
un resfriado.
Fuente: PrevenControl