La mitad de los trabajadores del conjunto de Europa consideran que el estrés relacionado con el trabajo es habitual, y cuatro de cada diez opinan que esta cuestión no se aborda correctamente en su lugar de trabajo. La precariedad en el empleo o la reorganización laboral se consideran la causa más común de estrés relacionado con el trabajo en el conjunto de Europa. Hay un conocimiento escaso de los programas o las políticas que facilitan a los trabajadores seguir en activo hasta la edad de jubilación o después de ésta, aunque la mayoría respalda su adopción.
Estas son las principales conclusiones del tercer Sondeo de opinión paneuropeo realizado por la Agencia Europea para la Seguridad y la Salud en el Trabajo (EU-OSHA).
Estrés
relacionado con el trabajo
En torno a la mitad de los trabajadores de
toda Europa (51 %) consideran que el estrés de origen laboral es habitual en
sus lugares de trabajo, y un 16 % afirman que es «muy habitual», según se
desprende del sondeo. Entre los trabajadores que consideran habitual el estrés
de origen laboral hay más mujeres que hombres (54 % frente a 49 %), y más
trabajadores de entre 18 y 54 años de edad (53 %) que trabajadores mayores de
55 años (44 %). La percepción del estrés de origen laboral varía también por
sectores: el personal sanitario o el dedicado a la asistencia y el cuidado de
otras personas son los que tienen mayor tendencia a decir que los casos de
estrés de origen laboral son habituales (61 %, incluido un 21 % que afirman que
los casos son «muy habituales»).
Hay un vínculo entre la proporción de
trabajadores que afirman que el estrés laboral es habitual en sus lugares de
trabajo y los que afirman que no se controla bien. Siete de cada diez (72 %)
trabajadores de toda Europa que no consideran habitual el estrés de origen
laboral en sus lugares de trabajo afirman que éste se controla bien, mientras
que, por el contrario, seis de cada diez (58 %) trabajadores que consideran
habitual el estrés laboral en sus lugares de trabajo indican que no se controla
bien.
La causa más común de estrés relacionado
con el trabajo en toda Europa se considera la precariedad en el empleo o la
reorganización laboral (72 %), seguida de las horas de trabajo o de la carga de
trabajo (66 %). No obstante, entre los trabajadores jóvenes de edades entre los
18 y los 34 años, estas dos causas se consideran conjuntamente como las más
importantes (ambas suman un 69 %). Por otro lado, el personal sanitario o el
dedicado a la asistencia y el cuidado de otras personas seleccionan las horas
de trabajo o la carga de trabajo (77 %) en una proporción mucho mayor que la
media.
En países con un nivel elevado de deuda
pública hay mayor probabilidad de que los trabajadores señalen la precariedad
en el empleo o la reorganización laboral como causa de estrés relacionado con
el trabajo; el 73 % de los trabajadores en países con una deuda pública
superior al 90 % del PIB seleccionan estos factores como causa habitual de
estrés relacionado con el trabajo, en comparación con el 66 % en países con una
deuda pública del 60 % del PIB o inferior.
Seis de cada diez trabajadores (59 %)
consideran como causa habitual de estrés de origen laboral algunos
comportamientos intolerables como el acoso o la intimidación en el trabajo. Y
hay una proporción menor de trabajadores que consideran causas habituales de
estrés laboral la falta de apoyo por parte de sus compañeros y superiores (57
%) o las escasas oportunidades de control de las pautas de trabajo (46 %).