1.- El uso de pantallas de visualización de datos, si estás trabajando
con ellas más de 4 horas al día o más de
20 horas a la semana.
Daños: Alteraciones como pesadez de párpados, picores y quemazón en
los ojos. Visión borrosa o somnolencia.
Medidas: Coloca la pantalla de forma adecuada para evitar reflejos.
Realiza pausas periódicas mirando a un punto lejano.
2.- La postura adoptada durante
el trabajo.
Daños: Síntomas generales como dolor de cabeza o de espalda. Problemas
vasculares en las piernas.
Medidas:
Siéntate correctamente. Cuando uses el teclado apoya los brazos y las manos. Coloca el monitor
a la altura de los ojos y a una distancia superior a 40 centímetros.
3.- Las condiciones ambientales de tu puesto de trabajo como temperatura, iluminación o ruido.
Daños: Síntomas generales como dolor de cabeza o fatiga visual. · Molestias auditivas.
Medidas: Debes tener luz suficiente y un contraste adecuado entre
tu pantalla y el entorno. La temperatura se mantendrá, en verano entre 23 y 26
grados y en invierno entre 20 y 24.
4.- Relacionados con la organización de tus tareas o con aspectos como la
monotonía, aislamiento, falta de iniciativa o falta de pausas.
Daños: Ansiedad, irritabilidad o trastornos del sueño.
Medidas: Incorpora
al trabajo variedad de tareas de distinto tipo.
5.- Golpes contra
objetos, caídas o contactos eléctricos.
Daños: Contusiones, esguinces, fracturas y descarga eléctrica
accidental.
Medidas: Mantén el lugar de trabajo limpio y ordenado. No
manipules las conexiones eléctricas.